Hace ya unos meses que el brote del ébola viene atemorizando a muchos países.
Como bien se sabe, son más de 4,000 personas las que han muerto en Africa debido a esta peste. Además, ya son dos los casos confirmados en Estados Unidos, a pesar de que la segunda víctima pudo- nadie sabe cómo, por milagro de Dios de pronto- superar esta enfermedad.
No obstante, lo que nadie sabe, es que este virus no es ninguna novedad para científicos. Fue descubierto hace muchos años, en 1976. Sin embargo, no invirtieron la suficiente plata para combatirlo, ni para estar preparados por si en un futuro se disparaba el brote. Claro, no es si no hasta que el brote llega a Norte América para que todos los científicos se pongan la tarea de encontrar la vacuna que los salve.
¿Será por interés propio? A lo mejor que si, la cantidad de dinero que ganará aquella persona que logre crear una vacuna para combatir la peste, indudablemente, será desmesurada.
Lo que más me asusta a mi, es lo que podría llegar a pasar si esta peste- que muchos ingenuos predican empezará un 'apocalipsis zombie'- llegase a Colombia. Una profesora, en el transcurso de la semana pasada, me dijo algo que verdaderamente me puso a pensar, ¿qué sucedería si una persona en una localidad muy pobre en Bogota, como Ciudad Bolivar, se contagiase de esta peste? Sin duda alguna, las consecuencias serían demasiadas y aterradoras.
Pero no solo el ébola debe ser una preocupación. Creo que no será mucho tiempo más hasta que encuentren la cura para ella. Pero analizando la cantidad de pobreza en toda Colombia, y la cantidad de actividad ilegal que ocurre en nuestras selvas, llevando a los seres humanos a habitats reservados de los animales, puede que no sea mucho tiempo para que un brote parecido al que nació en el corazón de Africa, nazca en nuestros territorios, acabé con las pocas poblaciones indígenas que quedan, y llegué a las zonas urbanas de nuestro país. Y quien sabe, de pronto empiece una crisis mundial.
Lo ideal, sería que desde ya científicos se vayan preparando para que ocurra algo por el estilo. Además de buscar una cura para el ébola, estén preparados para que estalle una epidemia parecida en Colombia.
Claramente, no estoy diciendo que esto vaya a ocurrir necesariamente. Estoy diciendo que existen- aunque sean las más mínimas- posibilidades de que suceda. No me parece mala idea tampoco, que científicos estén preparados, pues, Dios no quiera, si pasará algo por el estilo, estaríamos en mejor posición para combatirlo. De pronto las consecuencias no serían como aquellas trágicas de las que nos enteramos todos los días, cómodamente en nuestras camas mientras leemos o vemos las noticias, que están aconteciendo en el occidente del continente africano.
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